GEOGRAFÍA Y POESÍA
DE GEOGRAFÍAS Y POESÍAS
Por VÍCTOR A. SAGARCIAGUE
Curiosa mezcla en esta tercera parte, la consabida información geográfica de donde vivo, MENDOZA, y las siempre interesantes poesías que suelen aparecer en la web.
RINCONCITO DE MI TERRUÑO
VARIANTES EN LAS NOMENCLATURAS
Para esta ocasión van unas denominaciones de cómo fueron diversas calles, plazas y cursos de agua en lo que constituyen la actual ciudad de MENDOZA desde su fundación (el 2 de marzo de 1.561) hasta las primeras décadas del siglo XX.
NOMBRE ORIGINAL DENOMINACIÓN ACTUAL
La medialuna Distrito de PEDRO MOLINA (GUAYMALLÉN)
Plaza mayor PLAZA PEDRO DEL CASTILLO
Calle la cañada CALLE ITUZAINGÓ
Zanjón o acequia de la ciudad CANAL CACIQUE GUAYMALLÉN
Hospital de los BETLEMITAS HOSPITAL SAN ANTONIO
Canal Tobar CALLE ALBERDI (GUAYMALLÉN)
Capilla de Nieve EL BERMEJO (GUAYMALLÉN)
El Carrascal o Hacienda de los agustinos Zona de calle Alem y Costanera
Acequia del Rey/Toma de Trapiche Canal Jarillal
Toma de Taxamar Canal Tajamar (bajo Avenida San Martín)
El barro/La ciénaga El plumerillo/Algarrobal (Las Heras)
Calle de la Chimba Avenida San Martín (de Cnel díaz hacia
el norte)
Acequia de Guevara Calle Paso de los Andes
Carril San Vicente Calle Belgrano (Godoy Cruz)
Calle de San Nicolás Avenida San Martín
Plaza Nueva Constitución Plaza Sarmiento (ex Buenos Aires)
Paseo público La alameda
Molino de Mata Esquina noroeste de Ayacucho y San Martín
Molino de Roquer Garibaldi y primitivo de la Reta.
AQUEL PARAJE
ANCHORIS es un sitio ubicado en la ruta entre LUJÁN DE CUYO y TUNUYÁN, su nombre proviene del pueblo ANCHORIS, en la provincia de NAVARRA, ESPAÑA. Se presume que el mismo fue aplicado en MENDOZA en la época colonial por el general JOSÉ FRANCISCO DE AMIGORENA, de origen vasco. En los frecuentes viajes que realizara como comandante de la frontera del sur mendocino, solía pernoctar en dicho paraje.
UNA POESÍA
Siguiendo con la selección de poesías de SERGEJ TIMOFEJEV de PÓSTER ESTILO PUNK SIN ENMARCAR se escoge otro poema como el mes pasado.
EL VIEJO MUNDO
Presencié el nacer del viejo mundo
casas ruinosas se erguían
a lo largo de calles enteras, desagües oxidados
interrumpidos a metros
de la acera, entradas con marcos arrancados,
y otros signos de victoriosa decrepitud: “Opeles” y
“Volkswagen” renegridos, abollados y
corroídos de óxido, han entrado al país en sucesivas
caravanas. Han llegado ancianos de todo
el mundo, nos han enviado a las viejas sobrantes,
los que alegre tosían cubriendo con el guante
de lana la boca
en las paradas del tranvía
y la vida se congeló. Todo se ralentizó, moroso.
Comenzó el goteo de grifos, más lento los policías
perseguían ladrones, que con lentitud sacaban
sus pistolas
y apretaban los gatillos, que se iban desplazando,
hasta por fin disparar la deflagrante flor.
Seguí una bala un siglo al menos. Y quedó
suspendida
en el aire, como pastilla caída en jarabe claro
y denso.
O como esa gragea amarilla de vitaminas con
la caducidad vencida,
que rodó tras el armario cubriéndola de polvo, papelitos y nostalgia.
Si quiere ampliar en estos temas, siempre en la biblioteca más cercana puede encontrar de estos contenidos.
Será hasta la siguiente nota desde ¡EL MANZANAR DE VÍCTOR!
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